Roscos de hojaldre y cidra



Para mis amigos:
Los "Roscos de hojaldre y cidra" forman parte de la pastelería andaluza, yo concretamente, los he comido desde siempre en Sevilla (los hay en todas las pastelerías) me gustan mucho, pero nunca los había elaborado.
La masa de hojaldre que en principio presentaba cierta dificultad en su preparación, ha quedado resuelta con la oferta que nos brindan los Super de láminas de hojaldre ya preparadas para elaborar toda clase de pasteles y dulces con toda comodidad.
En cuanto al cabello de ángel igualmente lo tenemos ya preparado y envasado perfectamente.
La glasa para la terminación del rosco es de fácil elaboración y el horno funciona con sólo apretar unos botones. así que nosotros prácticamente lo que vamos a hacer en vez de cocinar, es montar los roscos.
Ingredientes:
Dos láminas de hojaldre, Cabello de ángel (cidra). Un huevo, unas gotas de zumo de limón y Azúcar glas.
Elaboración:
Empezamos precalentando el horno a 180ª con calor arriba y abajo.
Extendemos las láminas de hojaldre sobre una bandeja de horno, las dejamos sobre el papel que traen y con la ayuda de un aro metálico o el borde de un vaso, vamos cortando círculos.
En el centro de los círculos practicamos otro corte con ayuda del tapón de plástico de una botella.
Para cada rosco necesitamos dos aros, pero para que no se separen al hornear, previamente pintamos con agua el aro de abajo, ponemos otro aro encima, presionamos levemente con los dedos y ya no se separarán en el horno. (Yo lo hago con el dedo mojado en agua).
Separamos la clara de la yema y reservamos ambas por separado.
Una vez unidos los dos aros, pintamos la capa superior del de arriba con yema de huevo y al horno, colocamos la bandeja en el centro y horneamos 10 ó 12 minutos o hasta que estén dorados.
Mientras preparamos la glasa; con dos cucharadas de clara de huevo que ponemos en una taza, unas gotas de zumo de limón y vamos agregando azúcar glas y removiendo con una cucharilla hasta tener unas pasta de la textura de la leche condensada.
Sacamos la bandeja del horno y dejamos que se enfrien.
Una vez fríos cubrimos los roscos con cabello de ángel y sobre éste un hilito de glasa y nuestros roscos están terminados.
Detalles:
El hojaldre sobrante de cortar los aros no nos sirve si lo amasamos para aprovecharlo, ya que al manipularlo pierde la propiedad de inflado que traen de fábrica.
Un abrazo.
                  Pepe Atalaya.

Sevilla, 21 de Diciembre de 2015.-








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